TOLEDO TANGENCIAL
A mí me tocó por destino un colegio religioso, para aprenderme los profetas menores como la delantera del Bilbao; de aquello aprendí a tener ejercicios espirituales en casona de retiro, para que te actualizaran tu meollo espiritual, entre misterios y canguelo al demonio; aunque siempre había algún tunela que se llevaba una baraja. Como no era gratis, lo conocí por comentarios y los caretos devotos de los más aplicados. Ya de mayorcete edil, el querido alcalde Pedro Aparicio, nos organizaba paradas de actualización y persecución de nuestros objetivos de gobierno, en algún respiradero de nuestro entorno. Propósito de enmienda, empacharse de migas y emborronar de café los apuntes. Todo lo que da de sí mi memoria natural, más o menos, me lo ha evocado el Gobierno y la cúpula del PP, quienes se han reunido de finde en Toledo, para aguarle la fiesta el uno al otro pasado los Reyes, la Pascua Militar, más el Pleno pulmón de las medidas anticrisis. No sé si los ministros y adláteres, que por deber tienen que estar de guardia con las antenas encendidas, pero don Feijóo ha ordenado a su parroquia que se dejen los móviles en casa; pensamos que para no distraerlos de la monserga, pero como en la tropa hay más de uno de no fiar, quizá también sea una prevención para que nadie registre o airee los secretos de la tropa. Los españoles centrífugos y centrípetos, estamos en otra cosa, la cuesta de Enero por si fuera poco, más un Madrid-Barcelona de pago en nuestra Riad del alma. Monseñor Alberto está que se sale por la madraza de todas las encuestas, y ha organizado una vuelta España, para repudio colectivo de los males del Sanchismo; el Presi con sus mosqueteros por contra, desenvainará la espada toledana para imponer el Quijotismo extrarradio. Es una lástima que no se tomaran el mazapán juntitos, para amasar mejor gloria que la polarización que vivimos.
Curro Flores
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