SENTIDO COMÚN FEMINISTA

SENTIDO COMÚN FEMINISTA

Hoy se cumplen veinticinco años del asesinato atroz, por su marido, de Ana Orantes; el vicepresidente del gobierno de Aznar, secretario general del PP, excelentísimo señor don Francisco Álvarez Cascos, con todo el  sentido común que le socorría, no tuvo otra forma de calificar el terrible suceso, con un –caso aislado, obra de un excéntrico, al que se le ha ido la mano-.

De nuevo las calles se han llenado de sensatos ciudadanas y ciudadanos, para expresar su luto, indignación e impotencia por la violencia de género, reclamando una mayor atención por las instituciones públicas y, tratando de elevar el nivel de conciencia de la sociedad contra estos crímenes y agresiones contra las mujeres.

Con la ausencia de la senadora y alcaldesa de Marbella, la ilustrísima doña Ángeles Muñoz; ha celebrado un acto militante en la Ciudad del Paraíso, el excelentísimo gallego, don Alberto Núñez Feijoó, quién por sus apreturas de agenda, no se ha podido sumar a la manifestación del 25N, celebrada en la capital malagueña, la más castigada por la violencia género en Andalucía; Juanma tampoco estuvo por falta de cámaras a juego, vacas o tractores.

La ley Orgánica de Garantía Integral de la Libertad Sexual; la que un machista de wisquises, a risotadas en la barra, le oí llamar la de “El sí de las niñas”, como si tan sensata bestia conociera la obra teatral de Leandro Fernández de Moratín. Ha provocado metralla, artillería de sus adversarios, y disensos feministas sobre la actividad de la Excma. Ministra de Igualdad doña Irene María  Montero Gil.

Ya dedique espacio y tiempo a la Ley, escribí mi carta de náufrago en mi trocito de piélago profundo, incluso soplé las olas para que le llegara al Secretario mañana de la Internacional Socialista. Años de compromiso y algún oficio en la política, me permiten decir que durante el trayecto de nuestra democracia, al Partido Popular el feminismo le ha pillado con el pie cambiado, tratando de buscarle calificativos y posturas a su plácido machismo original, pregúntense por Fraga. Pero los signos de los tiempos mandan y a feminismo  tocaba.

Don Alberto que de todo quiere dar probidad de juicioso, ayer se le escapó el regüeldo machista desde el atril, queriendo ser adalid y promover un feminismo con sentido común, le “manda carallo”, contra la ola de insensatez rampante. Como el sin sentido es el machismo, ha perdido una gran oportunidad de no airear sus posaderas, el hombre es novato.

Curro Flores